La incorporación de extranjeros en las unidades militares en defensa de la República se produjo desde los mismos inicios de creación de las columnas de milicianos al poco de producirse la sublevación del 18 de julio de 1936. Algunos eran residentes refugiados venidos de la Alemania nazi y de la Italia fascista y otros fueron algunos deportistas que se encontraban en Barcelona con motivo de las "Olimpiadas Populares" que habían de celebrarse entre le 19 y el 26 de julio, un evento en el podían participar delegaciones deportivas internacionales y que no necesáriamente participaban en las que habían de celebrarse en Berlin entre el 1 y el 16 de agosto.

En los meses siguientes llegarían voluntarios organizados por el Partido Comunista Francés a instancias de la Internacional Comunista según indicaciones de Stalin del 18 de septiembre de 1936. De franceses fueron la mayoría de combatientes unos 10.000  creándose batallones como el "Comuna de París", del Partido Comunista de EE.UU. como el  "Abraham Lincoln". La llegada de voluntarios extranjeros comunistas tuvo la inicial negativa de los anarquistas de CNT_FAI principales organizadores de las columnas de brigadistas sin embargo la necesidad de recluta obligó al gobierno del socialista Francisco Largo Caballero aprobó el 22 de octubre la constitución de las Brigadas Internacionales designando a su vicepresidente Diego Martínez Barrio. para dirigir la organización.

La División Orgánica de las Brigadas Internacionales quedó establecida en la Base Aérea de Los Llanos, Albacete. Aquí llegarían los voluntarios que habían presentado su solicitud cuya documentación tramitaba el Partido Comunista de Francia en París, llegaban por ferrocarril hasta Barcelona y posteriormente a Albacete donde se les daba formación militar y su destino procurando mantener juntos a los del mismo país para mejor entendimiento entre ellos por el idioma. Del número de brigadistas internacionales no hay documentación se calcula fueron unos 35.000 organizándose como Brigadas Mixtas a las que por diferenciarlas se les dieron números romanos XI, XII, XIII, XIV y XV.

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