La particularidad de los calzoncillos (35 euros la unidad) y las bragas (20 euros) es que están fabricados con un tejido especial que filtra cualquier tipo de ventosidad por muy apestosa que sea. La herramienta perfecta para neutralizar ‘los silenciosos’, que suelen ser los más pestilentes. El ‘efecto mofeta’ pasó a mejor vida.
Según indica la página oficial de Sherddies, la fibra Zorflex (nombre rarito para impresionar) de carbón activado (como las plantillas) absorbe los efluvios apestosos sin problemas. El olor se vaporiza cuando es atrapado y neutralizado por la prenda. Después, con un simple remojo, se reactiva la capacidad de la fibra para seguir cumpliendo su objetivo. ¡Qué maestros!
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Foto de internet
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