Durante la Guerra Civil (1936-1939) la aviación italiana desde su base en la isla de Mallorca realizó numerosos bombardeos sobre poblaciones españolas de la costa mediterránea a fin de probocar el miedo en la población civil que en cierto modo se sentía alejada de la realidad que suponía las acciones militares que los dos bandos con sus ejércitos estaban realizando en los campos de batalla. Este fue el motivo por el que en junio de 1937 la Generalitat de Cataluña creara la Junta de Defensa Pasiva para promover la construcción de miles de refugios públicos y privados donde la población pudiera refugiarse durante los bombardeos.
En la población barcelonesa de Calella se construyeron tres: el del Roser, el del Parque y el de la Granja, disponía cada uno de tres puertas para facilitar el acceso y salida y capacidad para 3.600 personas. El refugio del Parque tiene una galería principal de 66 metros, 2 metros de alto y 2 metros de ancho y tres galerías transversales de más de 20 metros de longitud cada una disponiendo de iluminación mediante baterías.
Por la población de Calella se instalaron alarmas que mediante un toque largo alertaban a la población y esta podía refugiarse en el que tuvieran más cerca hasta sentir tres toques cortos que indicaban que el peligro había desaparecido. Calella sufrió dos bombardeos el del 4 abril de 1937 que afectó a la industria más importante la textil Llobet-Guri que no probocó victimas mortales y la del 24 de noviembre de 1938 sobre el centro de la población que provocó tres muertos, heridos y la destrucción de unas 40 viviendas.
El refugio del Parque se rehabilitó y musealizó en 2010 y es visitable, en su entrada podemos ver unos paneles de explicación del motivo de su construcción, la espoleta de una de las bombas caidas y en el pasillo central otros paneles donde el visitante puede leer más explicaciones y fotografías de su construcción
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